A finales del 2018, Dragon Ball Super dio inicio a una nueva saga en el manga llamada ‘El prisionero de la Patrulla Galáctica’. Esta se desarrolló, por lo pronto, de forma exclusiva en el manga de Toyotaro y mostró a un nuevo villano de Goku y Vegeta: Moro.
Curiosamente, la policía estelar llegó a la Tierra para llevarse a Majin Buu. Pocos fans se imaginaban el motivo detrás de esta decisión. Goku y Vegeta decidieron detener estas acciones pero terminaron siendo llevados al espacio junto a Buu.
La gran revelación llegaría capítulos después. Jaco y Merus explicarían que dentro de Majin Buu vive el Gran Kaio-Shin, un milario dios que en su momento ya había luchado contra Moro y había dado su vida para debilitar al villano y así poder capturarlo.
Es así como Buu toma su forma de dios y explica que hay dos seres que llevan el poder de Buu en el universo: él y el pequeño Uub, quien es la reencarnación de su versión malvada que Goku eliminó.
Dragon Ball Super, lamentablemente, no trae muchos capítulos del combate entre los saiyajins y el villano, se deja de lado la historia del ser rosado. Es recién al final del capítulo 67 en donde se revela el futuro del manga.
Uub ya conoce que es pariente de Majin Buu y que tiene un enorme ki, al igual que los dioses. Por otro lado, el Gran Kaio-Shin se despide de sus amigos y vuelve a su forma de Majin Buu. Lamentablemente, Toyotaro y Toriyama decidieron que debía perder la memoria.
Realmente, de todo lo que vimos al final de esta saga, esto es lo más importante. Por lo pronto, se nos ha mostrado a Androide 73 y un nuevo combate que se lleva a cabo lejos de la Tierra pero poco tiene que ver con Kakaroto y compañía.