Marvel Studios recurrió a los viajes temporales para solucionar el desastre que Thanos hizo en Infinity War. Los Vengadores en Avengers: Endgame fueron al pasado para coleccionar todas las gemas y así hacer posible la restauración de la vida en el universo. Iron Man, no obstante, tuvo un fallo en su plan: él mismo se boicoteó al asegurar a Loki que no tendría una oportunidad en el futuro. ¡Menuda equivocación!
En Avengers: Endgame, Tony Stark viaja a la batalla de Nueva York en 2012 para coleccionar el Teseracto. Las cosas se complican en medio de la operación: una vez en sus manos, Stark del futuro deja caer el Teseracto por culpa de un Hulk enfurecido y Loki aprovecha el caos para huir usando el poderoso artefacto.
No sabemos bien cuál será el destino de Loki, ya que no hay pistas en Avengers: Endgame. No obstante, si echamos un vistazo a la primera película de Avengers, notaremos que hubo cierta ironía en el destino alternativo de Loki.
Cuando Iron Man y Loki se encuentran en la Torre Stark, hay cierto diálogo que hoy en día -teniendo en cuenta el desenlace de Avengers: Endgame- tiene un doble sentido.
"No hay una versión de la historia en la que obtienes el triunfo", dice Stark antes que su propia versión del futuro haga posible que Loki escape.
¿Será que los guionistas ya tenían preparado este desenlace desde hace muchos años? Sin duda, el Universo Marvel aún tiene más sorpresas que deberemos hallar en las próximas fechas.