Griselda Blanco fue una mujer que infundió terror en la década de los 70 y 80, y cómo no iba a hacerlo si era una narcotraficante y criminal colombiana muy sanguinaria que fundó el cártel de Medellín. Además de haber sacado de su camino a sus rivales y gente desleal, a ella no le tembló la mano al momento de acabar con la vida de dos de sus esposos. Las razones en los siguientes párrafos.
Cabe señalar que a raíz de ser vinculada con el crimen de sus exparejas, fue conocida como ‘La viuda negra’; aunque también recibió otros apelativo tras estar inmersa en el mundo de las drogas: ‘La Madrina’ o ‘La Reina de la Cocaína’.
¿POR QUÉ GRISELDA BLANCO MATÓ A SUS DOS ESPOSOS?
La vida amorosa de Griselda Blanco siempre ha sido tema de conversación, ya que se dijo que era una mujer a la que le gustaba sentirse plena en el aspecto sexual, motivo por el que habría tenido gran cantidad de parejas; sin embargo, solamente se casó con algunos.
Su primer esposo fue Carlos Trujillo, a quien conoció luego de huir de su casa tras una discusión con su madre a los 14 años. Él la ayudó a ingresar a Estados Unidos falsificando sus documentos. Fruto de su matrimonio, tuvieron tres hijos: Dixón, Uber y Osvaldo. Al poco tiempo de nacer el último hijo, él falleció por una cirrosis, pero algunos aseguran que ella estuvo detrás de su muerte.
Después, Griselda Blanco contrajo nupcias con Alberto Bravo, un narcotraficante con el que estableció un negocio de cocaína importante en el país norteamericano. Entonces, ¿por qué lo mató? Aparentemente, todo marchaba bien hasta que encontró a su marido engañándola en un bar. Ella no lo dudó y le dio varios tiros en la cabeza y uno en el estómago.
Posteriormente, la colombiana se casó con Darío Sepúlveda, con el que tuvo un hijo al que llamó Michael Corleone, en honor a un personaje de “El Padrino”. Los conflictos en el matrimonio llegaron y la relación no daba para más, por lo que el esposo decidió irse de la casa, pero llevándose a su hijo. Como Griselda no iba a permitir tal afrenta, buscó a su marido y lo asesinó.
De esta manera, ‘La viuda negra’ sembró terror y respeto entre sus subordinados y la gente, quienes le temían por su crueldad, por lo que llegó a convertirse en la máxima responsable del negocio de la coca en Estados Unidos.