Después de 12 temporada, “The Big Bang Theory” llegó a su fin a mediados de mayo de 2019, pero en todos estos años no se había hablado tanto sobre el tema como en el libro oral de Jessica Radloff “The Big Bang Theory: The Definitive, Inside Story of the Epic Hit Serie”, en el que sus protagonistas revelaron cómo fue que se enteraron que la ficción no tendría más temporadas y cuáles fueron sus primeras impresiones.
Jim Parsons ya había decidido no seguir en la serie y, de hecho, cuando se reunieron para el comienzo de la temporada 12, se sentía “como un mentiroso en esa [primera] lectura de mesa”, pues sabía que después de esos 24 episodios era todo para él. Por lo que decidió hablar con los productores ejecutivos, Chuck Lorre y Steve Molaro.
La lectura tuvo lugar un miércoles por la tarde y la reunión con Lorre, Molaro y Parsons se produjo a la mañana siguiente y le expuso sus deseos de dejar la ficción. Durante los siguientes seis días, el elenco se mantuvo en la oscuridad mientras Lorre y el entonces presidente y director ejecutivo de Warner Bros., Peter Roth, abordaron el asunto con los ejecutivos de CBS y Warner Bros.
¿CÓMO LES DIJERON A LOS ACTORES SOBRE EL FIN DE “THE BIG BANG THEORY”?
Una semana después, Chuck Lorre reunió al elenco, junto con Molaro y el showrunner Steve Holland, en su oficina. Lorre dio la bienvenida a todos, luego pasó la batuta a Parsons, quien no esperaba liderar la reunión. “Tenía la sensación de que [Jim] estaba enojado conmigo porque tal vez pensó que iba a diseñar el futuro, pero no pensé que era mi lugar para hacerlo”, contó el productor.
“Así que les explicó que estaba listo para despedirse al final de la temporada 12. Y luego dije que no veía un camino a seguir sin Sheldon y, francamente, no quería ver un camino a seguir con nadie saliendo del espectáculo”, agregó.
Tras la reunión se emitió un comunicado sobre el final de “The Big Bang Theory”.
¿CÓMO TOMÓ LA NOTICIA EL ELENCO?
Lorre reconoce que hubo “mucho llanto” en su oficina ese día, particularmente de parte de Kaley Cuoco. “El impacto de ‘Oh, Dios mío, ¿qué sigue?’ daba miedo”, recuerda la actriz. “Lloramos durante horas... Miré a Chuck y dije: ‘¿Qué vamos a hacer?’ No podía respirar. Se sentía como una muerte”, agregó.
Johnny Galecki confesó que el elenco fue sorprendido y que el impacto no provino de la decisión de Parsons, “sino de que no había tenido esa conversación con sus compañeros de reparto primero para prepararnos”, dijo. “Simplemente no estaba de acuerdo con la forma en que se manejó. Pensamos que íbamos a ir a la oficina de Chuck para hablar sobre la renegociación, y luego Chuck le pasó la batuta a Jim. Y Jim se sorprendió y obviamente lo tomó por sorpresa”.
Los sentimientos heridos persistieron entre el trío principal. A la mañana siguiente, Molaro recibió un mensaje de texto de Cuoco diciendo que estaba molesta con Parsons y que no sabía si podría trabajar ese día. Galecki también se acercó a Lorre para expresar sus frustraciones. Finalmente se presentaron para el recorrido, pero estaba “un poco frío” y “ninguno de ellos estaba hablando entre escenas”, detalló Molaro, y según Holland, “Kaley apenas podía hacer contacto visual con Jim durante el recorrido, pero lo superaron”.