Hay veces que no sabemos elegir entre una laptop gamer o una PC gamer. Compañías como Lenovo, Acer y Dell cuentan con ofertas interesantes según las exigencias del usuario. En esta oportunidad, hablaremos del HP Omen 15.
Primero hay que ser muy específicos con esta versión de la HP Omen 15. La versión que estás observando es la DC0007LA, y esta trae un procesador Intel Core I7 y una tarjeta de video NVIDIA GTX 1070 de 8GB.
También cuenta con 16GB de memoria RAM en su versión estándar, un disco duro de 1 TB y una pantalla de 15.6 pulgadas Full HD.
Si hablamos del software, el HP Omen 15 viene con sistema operativo Windows 10 Home y servicios exclusivos del fabricante. Entre ellos, destacan el Omen Command Center dedicado a la personalización de tu teclado y el HP Connection Optimizer, que alterna entre los puntos de acceso inalámbricos para una mejor conexión WiFi.
Veamos ahora la evaluación.
La HP OMEN 15 puede resultar pesada por sus dos kilos y medio, pero se justifica en el rendimiento. La pantalla de 15.6 pulgadas soporta 144 Hz en 1080p, haciendo que la tarjeta NVIDIA 1070 corra a todo dar con títulos exigentes.
La conectividad de la HP Omen 15 es un punto a favor al contar con puertos USB 3.0, un USB-C con interfaz Thunderbolt 3, un Mini DisplayPort, un HDMI y un conector RJ-45. Todo eso en un solo equipo es algo que se agradece para los gamers con conocimiento más avanzado.
La HP Omen 15, además, mantiene a raya la temperatura, pero aún así es perceptible en las manos tras largas sesiones de juego. Otra cosa son los dos ventiladores del dispositivo, que funcionan de maravilla, pero el ruido que producen puede distraerte de la experiencia inmersiva del juego.
Mucha potencia exige una batería a la medida. La HP Omen 15 ofrece hasta 4 horas de autonomía en condiciones muy básicas, pero a lo mucho hasta 2 horas y media en pleno juego según las exigencias del título. Eso sí, existe cierta diferencia a nivel gráfico cuando juegas conectado a la corriente eléctrica.
En conclusión, la HP Omen 15 destaca por su rendimiento y calidad gráfica, aunque arrastre el eterno problema de la autonomía, algo bastante común en el rubro de las laptops gamers. Puede decirse que es una buena inversión teniendo en cuenta sus prestaciones operativas para lo que se le puede exigir a una portátil.