La consola de nueva generación Xbox Series X compartió en un comunicado oficial su precio y fecha de venta: el 10 de noviembre se venderá esta consola a 499 dólares en los Estados Unidos. No obstante, la gran sorpresa es que la empresa también prepara el lanzamiento de una consola de menor precio y características llamada Xbox Series X (US$299).
Pese a que los gamers podrán elegir la versión que más se acomode a su bolsillo, la firma de análisis de mercados DFC Intelligence ha calificado como confusa y desordenada la estrategia de Microsoft.
“El problema es que el jugador core no quiere conformarse con la segunda mejor [opción], incluso con un agudo descuento. Esto se aplica especialmente a los compradores anticipados que representarán el objetivo de los sistemas de juego durante el primer año después del estreno”, explica la compañía.
“La confusión del consumidor no es positiva para Microsoft en este caso. Los consumidores ahora tienen la alternativa de pagar $300 dólares por un sistema de segunda clase y quién sabe cuánto más por el producto completo (se espera que la Xbox Series X cueste $500 dólares). Esa estrategia puede funcionar para un iPhone, pero una consola de videojuegos es diferente”, añade el comunicado.
Según la empresa, basta con las consolas actuales Xbox One para dar el salto a lo digital vía XCloud, Game Pass o Cloud Streaming. “Resulta menos que ideal para vender un nuevo sistema de juegos de gama alta", finaliza DFC Intelligence.