Reimond Manco debutó con la Selección Peruana un 6 de febrero de 2008 en un partido amistoso ante Bolivia en La Paz. (Foto: Archivo GEC)
Reimond Manco debutó con la Selección Peruana un 6 de febrero de 2008 en un partido amistoso ante Bolivia en La Paz. (Foto: Archivo GEC)

Febrero de 2008. El veraniego sol de la Lima de aquel año irradiaba incandescentemente sobre los rulos imperfectos de un imberbe futbolista que apenas rosaba la mayoría de edad. Una joven promesa que tras jugar el Mundial Sub-17 meses atrás, ya comenzaba a soñar con viajar a Europa teniendo solo unos cuantos partidos en con . Su nombre: , o como ya se hacía llamar, ‘Rei’.

Aunque aún no tenía los pasajes comprados para Eindhoven, PSV lo tenía en la mira. Su viaje a los Países Bajos recién se daría a mediados de ese 2008, pero antes, como ya lo había experimentado en los últimos meses en su breve carrera, el fútbol le tendría otra prematura experiencia.

El primer llamado

La Selección Peruana vivía por aquellos días los rezagos del escándalo del Hotel El Golf Los Incas en noviembre de 2007. El plantel de José Guillermo del Solar había quedado diezmado por las exclusiones de Claudio Pizarro, Andrés Mendoza, Santiago Acasiete y Jefferson Farfán, por lo que ante la urgencia de buscar nuevas variantes para el equipo, el técnico de la ‘Bicolor’ convocó a Manco el 29 de enero.

El Estadio Hernando Siles de La Paz sería el escenario que vería por primera vez al juvenil aliancista vistiendo la ‘Blanquirroja’, un 6 de febrero de 2008. El resultado de aquel amistoso ante la Selección de Bolivia terminaría siendo anecdótico (2-1 en contra), ya que días después las portadas de los diarios le darían mucha cabida al estreno del ‘Rei’ con la ‘7′ en la espalda, quien al ingresar por Sidney Faiffer en el segundo tiempo tuvo treinta minutos para mostrar uno que otro chispazo ante el combinado altiplánico.

Su debut –como era de esperarse en un país futbolero que normalmente anhela con la llegada de un salvador para encontrar la efímera felicidad– causó entusiasmo. Reimond jugaría un amistoso más en la era ‘Chemo’ del Solar un mes después ante Costa Rica en Iquitos (3-1), sin embargo, todo lo que se avizoró sobre su devenir en el fútbol terminaría cayendo en un saco roto.

Reimond Manco solo disputó siete partidos con la Selección Peruana, todos ellos amistosos y ninguno por alguna Eliminatorias. (Foto: Getty Images)
Reimond Manco solo disputó siete partidos con la Selección Peruana, todos ellos amistosos y ninguno por alguna Eliminatorias. (Foto: Getty Images)

El breve camino de lo que no fue

No se necesitan más de dos manos para contar los partidos que jugó con la selección peruana: solo fueron seis, los dos con ‘Chemo’ y otros cuatro con Sergio Markarián en el banquillo. Inclusive, cuando el ‘Mago’ lo tomó en cuenta como parte de su proyecto camino a Brasil 2014, el por entonces jugador del Juan Aurich fue parte de otro escándalo y terminó siendo excluido del equipo junto a John Galliquio y Jefferson Farfán. “Cuando vestimos la ropa de la selección, la conducta debe ser intachable”, había dicho el técnico uruguayo cuando llegó al Perú.

Aunque fue perdonado tres años después para jugar un amistoso ante Corea del Sur, solo jugó 45 minutos y su sustitución, la que marcaría su despedida definitiva del combinado nacional, coincidió con el debut de un jugador que sería clave para que Perú regrese a una Copa del Mundo después de 36 años: Edison Flores.

Seguramente muchos esperábamos más de Reimond Manco con la Selección Peruana, pero nunca, incluso en sus mejores momentos con León de Huánuco (2015), Unión Comercio (2017-2018) o Sport Boys (2019), hablar de una posible convocatoria fue un tema serio. Al contrario, quienes se atrevían a mencionar su nombre previo a un anuncio de Ricardo Gareca, solo lo hacían desde la nostalgia engañosa y los destellos opacos que dejaba de vez en cuando en alguna cancha del país.

Entonces, pues, hoy 6 de febrero de 2022, catorce años después de aquel soleado verano de 2008, recordar el debut de Reimond Orangel Manco Albarracín en la Selección Peruana puede servir como un pequeño ejercicio reflexivo. Él ya no piensa en Eindhoven ni en algún exótico club que lo lleve a ganar una Champions League, pero sí, ya con 31 años a cuestas y sin rulos, en seguir sintiéndose futbolista en donde le toque estar.


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