Wendy no podía creerlo cuando vio a 4 de sus 10 hermanos cruzando las calles de Portland para darle el encuentro. (Foto: @kevinvdahlgren/Twitter)
Wendy no podía creerlo cuando vio a 4 de sus 10 hermanos cruzando las calles de Portland para darle el encuentro. (Foto: @kevinvdahlgren/Twitter)

Gracias a un video que se hizo en a finales de 2022, Wendy, quien llevaba mucho tiempo viviendo en la indigencia en las calles de la parte vieja de Portland, , consiguió lo impensable, reencontrarse con su familia a la cual le había perdido la pista hace mucho y su historia conmovió como concientizó a millones.

En clip en la mencionada red social fue compartido por Kevin Dahlgren (@kevinvdahlgren) el pasado 31 de diciembre obteniendo más de 2.3 millones de vistas, donde Wendy dice esto de vivir en la precariedad:

“‘Es pan comido... obtienes tres comidas al día y no tienes que hacer una mi**da... despierta, come, drogado, despierta, come, drogado’, repite. Una mujer sin hogar compartió conmigo por qué es tan fácil estar sin hogar. Fue brutalmente honesta porque odia la habilitación. ‘Nos están amando hasta la muerte’”, dice la descripción del clip.

Mira aquí el video viral

Sus hermanos quieren verla de nuevo

Cuando el metraje llegó a los medios de comunicación estadounidenses, KATU, por intermedio de Angelica Thornton fue a buscar a Wendy, quien esta vez tenía algo distinto que contar, pues aseguró que sus palabras fueron muy generales y que, contrario a lo que dijo, su experiencia viviendo en las calles no solo era más complicada, sino también mucho más difícil.

Pero, la historia de nuestra protagonista hubiera acabado ahí de no ser porque su familia que vive en Utah se topó con su testimonio en Twitter, por lo que no lo pensaron dos veces para comunicarse con Dahlgren y coordinar un encuentro con la indigente en Portland.

Quieren sacarla del mundo de la adicción

Esta reunión se concretó el pasado 30 de enero, cuando 4 de sus 10 hermanos se aparecieron en la calle donde acampa, su emoción e incredulidad se vio reflejadas en su rostro lleno de felicidad, la cual dio lugar a los abrazos más sentidos tras el largo tiempo de separación.

Jason Mitchell, uno de los hermanos menores de Wendy, reconoció la adicción de su hermana, quien se ha comprometido a ayudarla a salir del mundo de las drogas por su propia cuenta y luego evaluarán asistir a alguna agencia que provea servicios de rehabilitación: “realmente creo que tenemos un poco responsabilidad como su familia para compensar la brecha entre todos los servicios que están allí y como entrenarla y brindarle motivación”, sentenció.


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