vuelve a ser noticia en la actualidad y no precisamente para bien. Y es que no es la primera vez que existen reportes sobre ambientes de trabajo tóxicos en la industria de los videojuegos, pues en esta ocasión le toco a la empresa recibir una demanda por un antiguo empleado que ha afirmado haber experimentado racismo y acoso en la división de esports de . El nivel de abuso fue tan elevado, que obligo al empleado a abandonar su puesto de trabajo.

Julian Murillo-Cuellar, de ascendencia mexicana, mostró su indignación en 'TwitLonger' para contar su historia de discriminación y abuso racial que sufrió en el 2016. Ademas, ha presentado su caso a la Equal Employment Opportunity Commission, un organismo estadounidense que se encarga de vigilar y estudiar este tipo de abusos laborales relacionados con el racismo o las creencias religiosas. Si bien ha estado inmerso en un proceso judicial durante varios meses, Murillo confirma que ha sido ahora cuando ha sido capaz de reunir fuerzas para contar su experiencia y compartirla con otros usuarios.

Murillo-Cuellar comenta que todo comenzó con bromas por parte de Gemma Barreda, excompañera de trabajo, quien constantemente señalaba que sus raíces mexicanas hacían que tuviera una fuerte tendencia a ser sexista. Esas bromas, comentarios y acoso se salieron de control hasta que fue apodado como el ‘mexicano machista’ ante sus compañeros de trabajo, lo que generó un ambiente poco favorable para desempeñar sus funciones.

El exempleado de Blizzard también comenta que en varias ocasiones trató de poner una solución al problema, pero que no fue tomado en cuenta ni se dio la debida importancia al tema. 

Todas estas situaciones provocaron que Murillo-Cuellar tuviera crisis de ansiedad, ataques de pánico y pensamientos suicidas, derivando en su salida de la compañía a punto de acabar con su vida. 

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