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El futuro de Khvicha Kvaratskhelia (23 años), la joven estrella georgiana que deslumbró en su irrupción con el Napoli, parece alejarse de Italia. Según reportes de La Gazzetta dello Sport, las negociaciones para renovar su contrato, que expira en 2027, están en un punto muerto debido a diferencias económicas insalvables entre el jugador y el club. Esta situación habría llevado a los agentes del extremo a reactivar contactos con el FC Barcelona, equipo que ya mostró interés por él hace un año. Sin embargo, el camino hacia su incorporación no será sencillo, especialmente en un mercado tan competitivo y con un presidente napolitano conocido por su férrea postura en los traspasos.
El conflicto entre Kvaratskhelia y el Napoli tiene su raíz en las condiciones salariales del jugador. Con un sueldo de apenas 1,2 millones de euros netos por temporada, el extremo georgiano es uno de los peor remunerados de la plantilla. Esta situación ha generado un profundo malestar en su entorno, que exige un aumento significativo en sus ingresos, junto con el reconocimiento de una mejora retroactiva para compensar lo que consideran una injusticia económica.
Aunque el Napoli ha ofrecido un aumento hasta los cinco millones de euros anuales, ha condicionado esta subida a la inclusión de una cláusula de rescisión de 130 millones de euros. Esta cifra, que busca blindar al jugador frente a potenciales ofertas, no es aceptada por sus agentes, lo que ha congelado las negociaciones desde octubre.
El Barça: interés sí, pero con cautela
Los representantes de Kvaratskhelia habrían reabierto contactos con el Barça, conscientes de la necesidad del club blaugrana de reforzar su banda izquierda. Sin embargo, el Barça ha adoptado una postura prudente. Aunque Kvaratskhelia encaja en el perfil deseado por Xavi Hernández, quien busca extremos que combinen desequilibrio y capacidad goleadora, el club catalán no está dispuesto a participar en una subasta por el jugador.
El principal escollo para el Barça radica en Aurelio De Laurentiis, presidente del Napoli, un negociador conocido por exigir cifras astronómicas y mantener una posición inflexible en las conversaciones. Desde el club catalán tienen claro que no están dispuestos a pagar 80 millones de euros, especialmente en un contexto financiero aún limitado por las restricciones de *LaLiga*. Además, cualquier avance dependerá de la postura que adopte Kvaratskhelia y su voluntad de facilitar el movimiento.
Otros pretendientes al acecho
El interés del Barça no es el único sobre la mesa. El PSG, que ya intentó fichar al georgiano el verano pasado, se mantiene atento a los movimientos. Con mayor capacidad económica y un historial de apuestas por jóvenes talentos, el club parisino podría entrar en escena si el Napoli decide finalmente vender a Kvaratskhelia. Esta competencia añade un desafío adicional para el Barça, que, a diferencia del PSG, no puede permitirse grandes desembolsos sin comprometer su estabilidad financiera.
Por ahora, todo indica que el futuro de Kvaratskhelia dependerá de un intento final de negociación entre el jugador y el Napoli antes del cierre de la temporada. Si no se alcanza un acuerdo, la puerta estará abierta para que otros clubes exploren su fichaje. Desde el Barça, la directiva espera pacientemente a que el jugador tome la iniciativa, presionando para salir y fijando un precio más acorde con el mercado.
¿Quién es Khvicha Kvaratskhelia?
Khvicha Kvaratskhelia, también conocido como “Kvara”, nació el 12 de febrero de 2001 en Tbilisi, Georgia. Es hijo de Badri Kvaratskhelia, exfutbolista y entrenador con raíces en Georgia y Azerbaiyán. Comenzó su carrera futbolística en la academia del Dinamo Tbilisi, el club más importante de su país, donde debutó a los 16 años en 2017. Sin embargo, solo jugó cuatro partidos antes de trasladarse al FC Rustavi, un recién ascendido a la liga georgiana, donde destacó con tres goles en 18 partidos.
Su talento llamó la atención en Rusia, y el Lokomotiv de Moscú lo fichó en calidad de préstamo. Allí jugó 10 partidos, anotó un gol y ganó su primer título. Posteriormente, firmó con el Rubin Kazan, donde brilló durante dos temporadas consecutivas como el mejor jugador joven de la liga rusa. Su proyección internacional aumentó tras un gol a España con la selección de Georgia, mostrando su calidad en las eliminatorias para el Mundial 2022.
La guerra en Ucrania marcó un punto de inflexión en su carrera: suspendió su contrato con el Rubin Kazan y regresó a Georgia, donde jugó para el Dinamo Batumi. Allí, su talento fue evidente, marcando 8 goles en 11 partidos y siendo nombrado MVP de la primera vuelta de la liga.
Finalmente, el Napoli se adelantó a otros grandes clubes europeos y lo fichó en 2022 por más de 11 millones de euros. Desde entonces, Kvaratskhelia se ha consolidado como una de las estrellas emergentes del fútbol mundial.
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