Sergio Ramos encendió la furia del Sánchez Pizjuán al marcar un gol de penal y provocar a la hinchada del Sevilla con su celebración. A manera de respuesta por los insultos a su familia, el defensor hizo un polémico gesto a la tribuna.
Más tarde, ante los medios de prensa, el crack del Real Madrid se quejó del maltrato que recibe de los hinchas radicales del Sevilla, los 'Biris', cada vez que visita el Pizjuán y se comparó con Dani Alves e Ivan Rakitic, dos exsevillistas al que "tratan como héroes".
Lo que quizá no recuerda el capitán merengues es que la salida de los tres jugadores del Sánchez Pizjuán fue muy distinta. Ramos se fue por la puerta falsa y con el repudio de los hinchas, pese a que dejaba 30 millones de euros en las arcas del Sevilla.
Distintas fueron las salidas de Dani e Ivan. Ambos se despidieron en una conferencia de prensa y por su pesar de dejar el Sevilla, no pudieron evitar las lágrimas. Incluso, el crack croata acudió al mismo estadio, lo ovacionaron y dijo adiós. Ahí tienes, Sergio.
LEE TAMBIÉN...