Liverpool y Arsenal protagonizan el partido más atractivo de la jornada europea. En un cotejo que pintaba para ser más reñido, el cuadro de Klopp logró hacerse con el balón y convertir en un monólogo el encuentro.
El primer gol llegó gracias a Salah, quien le dio un gran centro a Firmino. El egipcio dejó en el camino a Nacho Monreal y sacó un centro perfecto que fue bien aprovechado por el atacante brasileño.
Liverpool le ganó el partido al Arsenal en la mitad de la cancha, ya que lo anticipó y le cortó las jugadas en ese sector del campo. Sin embargo, el contragolpe del segundo gol comenzó en el área propia, tras un robo a Alexis Sánchez.
El chileno trató de filtrar un pase, pero fue interceptado por Lovren. Tras esa situación, la sucesión de pases rápidos del Liverpool no se hizo esperar.
Al final, Sadio Mané recibió el esférico tras el servicio de Firmino. El senegalés enganchó a Bellerin y disparó dándole al balón potencia, pero a la vez una curva que terminó por vencer a Cech.