El Etihad Stadium fue testigo de un partido de infarto. Dos equipos millonarios, llenos de estrellas y con ansias de gloria. A pesar de que ambas escuadras ya no tienen opciones de alcanzar al líder Chelsea, un clásico siempre tendrá un sabor especial, sobre todo en la Premier League. Marouane Fellaini y Sergio Agüero ayudaron a condimentar el cotejo con una polémica jugada, la cual terminó en expulsión para el volante belga, causando la molestia de José Mourinho, quien recriminó su actitud.
Manchester City, como cuadro local, fue quien trató de imponer el juego a base de jugadas asociadas y ataque en bloque. Manchester United esperaba robar el balón en la media cancha y salir con contraataques rápidos, aprovechando la velocidad de Marcus Rashford y Anthony Martial.
Lamentablemente para los amantes del fútbol, el marcador no se movió, a pesar que en los últimos minutos le anularon un gol a Gabriel Jesús, quien volvió de una crítica lesión. Manchester City se adueñó de los últimos minutos del partido y generó la frustración en el cuadro de Mourinho.
Todos estos sentimientos se vieron reflejados en Marouane Fellaini, quien protagonizó una controversial jugada luego de que le hiciese una falta a Sergio Agüero, cuando los de Guardiola encimaban al Manchester United.
El 'Kun' se levantó rápidamente para solicitar una cartulina amarilla para el belga. Inmediatamente, el volante increpó al argentino y lo impactó con la cabeza, causando la caída del delantero. El árbitro no dudó en sacarle la tarjeta roja.
Sin embargo, en la repetición de la jugada, se ve que, si bien existe la intención de agredir al jugador, el impacto no fue más que un roce. Pero la expulsión fue una buena decisión, ya que el reglamento insta a sancionar la intencionalidad, por lo que el belga se fue a las duchas.