La participación de en el terminó a los 55 minutos del partido en Turíb. Maurizio Sarri, entrenador de los ‘bianconeros’, ordenó la salida del portugués y el ingreso de Paulo Dybala.

El delantero luso, que llegó entre algodones al compromiso liguero, abandonó la cancha trotando, pero con cara de pocos amigos. Incluso, el delantero ni cruzó miradas con la ‘Joya’, quien le esperaba en con el brazo estirado.

Cristiano Ronaldo, muy enojado, se dirigió directamente a los vestuarios del estadio de Juventus. Ni siquiera saludó a Sarri, ubicado en la zona técnica, ni se colocó en la banca junto a sus compañeros.

A mitad de semana, contra Lokomotiv por Champions, el estratega italiano también sustituyó a CR7 en el minuto 81. Al igual que esta tarde, la decisión del entrenador tampoco fue del agrado del delantero.