De vez en cuando –muy de vez en cuando– surge una nueva promesa del fútbol mundial. Una que supera adversarios casi sin esfuerzo, que se cansa de marcar goles y cuyos detalles técnicos, algo tan ‘simple’ como el control de balón, delatan un talento mayor que el promedio. Ese es Joao Félix, del Benfica, la última ‘joya’ portuguesa en ser convocada por Fernando Santos a su selección lusa y que compartirá vestuario con nada más y nada menos que Cristiano Ronaldo.
Félix, en menos de un año, se ha convertido en el talento más buscado de toda Europa, y no es ninguna casualidad. Luego de debutar en el primer equipo, en agosto del 2018, el delantero ha convertido 15 goles en 26 partidos a nivel local, dos en copas nacionales y tres en la Europa League.
Pero el camino de Félix para jugar con las ‘Águilas’ no fue sencillo. Nacido en Viseu, una ciudad de solo cien mil habitantes, la familia de Joao encontró en las divisiones menores del Porto la oportunidad para que se desarrolle como futbolista. Ahí se quedó durante siete años, hasta que por un 'defecto' –uno que ahora le es de gran utilidad– los dirigentes decidió cortar su vínculo con el club. ¿Cuál? Su contextura delgada.
En 2015, Benfica le dio la contra al Porto, uno de sus eternos rivales, y reconoció talento por encima de cualquier característica física. En Seixal, Félix empezó a escalar de a pocos a nivel juvenil, incluso haciendo su estreno en la reserva con 16 años y 312 días, convirtiéndose en el segundo jugador más joven en debutar con el Benfica B.
La gran incógnita, para los que no han podido verlo jugar, es: ¿cómo juega Félix? Sería fácil que uno lo describiera como un gran regateador, con una capacidad de definición superlativa, que aprovecha el ancho de la cancha y atacar los espacios con criterio. Todo eso lo es. Incluso, varias exestrellas del ‘Glorioso’ ya lo comparan con históricos del fútbol.
Para Antonio Simoes, mediocampista que vistió la camiseta del Benfica entre 1961 y 1975, el juego de Félix se asemeja al mismo Johan Cruyff. “Tiene la misma elegancia y forma de jugar. Estamos en presencia de alguien que posee una inteligencia específica del juego. No necesita corregir nada en su juego, pero se le tiene que seguir enseñando”, afirmó en febrero al medio portugués Paraeles.
Otros lo comparan con el histórico Rui Costa, quien supo llevar la ‘10’ del Milán, Fiorentina, Benfica y la Selección de Portugal. “Me hace recordar a Rui Costa, por su calidad individual y la forma en la que trata el balón”, señaló el futbolista César Peixoto.
Si alguien ha observado de cerca el crecimiento de Félix a través de los años, ese ha sido el ahora gerente general del Departamento de Menores del Benfica, Nuno Gomes. Ambos llegaron casi en simultáneo a Seixal, y fue justamente Nunes el que le ofreció su primer contrato profesional a los 16 años. Según él, estuvieron convencidos de su talento desde el primer momento.
“Su relación con el balón, primer toque, inteligencia, son todas las cosas que lo definían como un jugador diferente, distinto. Nos quedó claro a todos que estábamos frente a un talento especial. Tiene la ventaja de pensar más rápido que otros jugadores.”, le confesó Gomes a CNN.
A pesar de su corta edad, Joao Félix ya estableció algunas marcas nacionales e internacionales. Por ejemplo, su triplete frente al Eintracht Frankfurt, en cuartos de final de esta Europa League, lo bautizó como el jugador más joven (19 años y 152 días) en convertir tres goles en dicha competencia, superando el récord que estableció Marko Pjaca en 2014 (19 años y 219 días).
En agosto del año pasado, el delantero anotó su primer gol en Primera División, en el empate 1-1 ante Sporting de Lisboa. Con ello, escribió su nombre en la historia como el jugador más joven en anotar en el reconocido ‘Derby Da Capital’. “Estoy estremecido. He estado trabajando para esto. Tengo que agradecer por la apuesta que este club ha hecho por mí”, dijo después del duelo.
Por el momento, el Benfica es el más beneficiado del apogeo de Joao Félix, cuyo precio pasó de dos millones de euros a 35 millones en menos de un año, según el sitio web Transfermarkt. Claro, las ‘Águilas’, conscientes de lo que tenían en sus manos, se aseguraron de renovarle hasta el 30 de junio de 2023 con una cláusula de rescisión de ¡120 millones! Sí, es un gran monto, pero varios clubes, entre ellos Barcelona, Manchester United y Real Madrid, están dispuestos a romper sus ‘chanchitos’ por el crack portugués.