El delantero del Atlético de Madrid Diego Costa fue suspendido el jueves por ocho partidos tras un altercado en que supuestamente insultó al árbitro Jesús Gil Manzano porque no pitó una falta contra él, lo que significa que se perderá el resto de la temporada.
Manzano le sacó la tarjeta roja a Costa, quien reaccionó furioso, varias veces aproximándose al árbitro para discutirle. En cierto momento sujetó al colegiado por el brazo y jugadores de ambos equipos tuvieron que intervenir.
Según el comité de competición de la federación española, Costa recibió cuatro partidos de suspensión por el insulto soez que habría proferido y otros cuatro por “violencia leve hacia los árbitros” al citar que, según el acta, sujetó a Gil Manzano del brazo para que no amonestase a otros compañeros.
A propósito de esta suspensión, recordamos otras duras sanciones a lo largo de la historia, con la de Paolo Guerrero, quien fue suspendido un total de 14 meses, que las cumplió en dos partes, por dar positivo en un control antidoping.
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