Jugar cualquier deporte siempre tiene sus riesgos. Con el fútbol sucede lo mismo. Cualquier incidencia o choque producido de forma casual o intencional lleva a las peores lesiones. En muchos casos, la recuperación es rápida, mientras que en otras, un futbolista puede quedarse muchos meses sin jugar al fútbol.
Pasó con Demba Ba en el fútbol chino. El ex-Chelsea peleaba una pelota y no espero que un golpe por detrás terminará en una lesión tan grave. La crudeza de la imagen ya recorrió el mundo. Así como él, otros futbolistas también sufrieron lesiones similares.
Se le abrió el muslo con una herida de 25 centímetros. Le sucedió a Ewald Leinen, en una de las peores lesiones en el fútbol alemán. Werder Bremen enfrentaba Arminia Bielefeld por la Liga de Alemania en la temporada 1981-82.
Coventry City vs. Manchester United en Old Trafford. Tras una jugada, el portero Peter Schmeichel se alejaba del lugar de la lesión que sufría David Busst. Una imagen demasiado cruel. Fractura de tibia y peroné.
Ya había mostrado su talento en el Barcelona, también en la selección de Brasil. Pero aparecieron las lesiones. La peor de todas, sin duda cuando jugaba por el Inter de Milán en el 2000. El diagnóstico, rotura parcial del tendón rotuliano de la rodilla derecha.
El lateral de Deportivo La Coruña sufrió una de las peores lesiones en la Liga de España. Se rompió la tibia y el peroné en un choque con Giovanella, jugador del Celta. Ocurrió en 2001 y se quedó sin poder jugar la Copa del Mundo un año después.
¿La razón por la cual Peter Cech utiliza un casco en cada partido? Una lesión en el 2006. El delantero Hunt golpeó con la rodilla al portero y le produjo una fractura de cráneo. "Tiene suerte de seguir vivo", dijo su técnico Mourinho tras el partido.
El colombiano sufrió una lesión en la rodilla al intentar rematar en el partido que el Mainz enfrentaba al Hamburgo por la Bundesliga de Alemania. Tuvo que se operado debido a que los ligamentos y meniscos salieron de su lugar.
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