Fabián Bustos registra 22 triunfos oficiales con Universitario. (Foto: Getty Images)
Fabián Bustos registra 22 triunfos oficiales con Universitario. (Foto: Getty Images)

Hasta antes del partido del último domingo en Cajabamba, tenía la deuda de no haber ganado en una ciudad de altura en toda la temporada, registrando cuatro empates y dos derrotas. Así pues, confirmó el gran presente de los merengues y los puso a tiro de campeonato a solo cuatro jornadas para que finalice el Torneo Clausura, siendo el único equipo que depende de sí mismo para llevarse la . Después de la derrota a manos de Melgar en la fecha 4, el 3-5-2 de Fabián Bustos encontró el camino para sostener su solidez a pesar de los diversos contextos que le tocó afrontar –como las lesiones de Sebastián Britos y Rodrigo Ureña– y lleva nueve encuentros sin perder, con dos empates y siete victorias de por medio.

Desde que asumió el buzo de Universitario tras la salida de Jorge Fossati, Fabián Bustos entendió que no tenía que cambiar mucho dentro de un sistema que venía funcionando de maravillas desde el año pasado y que, si bien algunos nombres se fueron –como Piero Quispe y José Carvallo–, solo tenía que encajar las nuevas piezas para repotenciar el colectivo. Antes de llegar a Ate, el argentino estuvo en América Mineiro de Brasil y ahí ya había empleado el 3-5-2 en algunos partidos. Eso sí, previo a eso, en Barcelona SC y Santos usó una línea de cuatro atrás con diferentes variaciones: 4-2-3-1, 4-3-3 y 4-4-2.

En tal sentido, más allá del esquema, Bustos buscó darle sus propios matices al funcionamiento colectivo de la ‘U’ y que el salto de calidad sea notorio con el correr de los partidos. Para que un sistema funcione como quiere el entrenador, los intérpretes son lo más importante, pues ellos ejecutarán la idea que se busca plasmar dentro del campo de juego. Pese a que en la Copa Libertadores los resultados no se dieron como esperaban en tienda crema –quedaron últimos del Grupo D con un triunfo, dos empates y tres derrotas–, en la Liga 1 se llevaron el Torneo Apertura con números contundentes: 12 triunfos, cuatro empates y una derrota, además 32 goles a favor y solo siete en contra, siendo el equipo menos batido en el certamen.

Universitario es líder del Torneo Clausura 2024 con 30 puntos. (Foto: Universitario)
Universitario es líder del Torneo Clausura 2024 con 30 puntos. (Foto: Universitario)

Si hacemos una comparación entre el equipo base de Jorge Fossati y Fabián Bustos, encontramos que las únicas diferencias están en el dueño del arco (Sebastián Britos tomó la posta de José Carvallo), el interior derecho (Jairo Concha y Horacio Calcaterra se turnaron para reemplazar a Piero Quispe) y el carrilero izquierdo (Nelson Cabanillas perdió la relevancia que tuvo en 2023 y alternó la posición con Segundo Portocarrero). La línea de tres su mantuvo intacta (Aldo Corzo, Williams Riveros y Matías Di Benedetto), Andy Polo continuó siendo determinante por derecha, mientras que la dupla de atacantes, conformada por Alex Valera y Edison Flores, se sostuvo en gran parte del campeonato.

Al analizar el funcionamiento que debe tener un 3-5-2, el que aplica Universitario reúne varias de las exigencias que tienen que cumplir los jugadores y eso lo convierte en un equipo sólido en cada una de sus líneas. Comenzando por los tres del fondo, Corzo, Riveros y Di Benedetto han sabido mantenerse firmes a pesar de que algunos rendimientos individuales no fueron tan regulares como el año pasado, algo que se ve reflejado en los números: con 13 tantos en contra, la ‘U’ es el equipo que menos goles recibió en la Liga 1 2024. Ni qué decir de Sebastián Britos, que pese a que se perdió siete partidos del Torneo Clausura por lesión, fue una de las figuras en el Apertura y sostuvo a su defensa en los momentos críticos.

En el mediocampo, además de la importancia del volante ancla para darle equilibrio al equipo, es necesario que los interiores se involucren constantemente en el juego y le den fluidez al balón para que las conexiones con los carrileros sean naturales. En este punto hay que considerar que Universitario perdió a Piero Quispe y ante su ausencia fichó a Jairo Concha y Christofer Gonzales. Mientras que ‘Canchita’ se marchó a Sporting Cristal a mitad de año, el primero ha tenido partidos en donde asumió un rol protagónico, pero otros en donde su desempeño fue muy intermitente. En ese sentido, Martín Pérez Guedes fue creciendo en relevancia y se hizo indispensable dentro del 3-5-2, cumpliendo un gran trabajo en el ida y vuelta, participando activamente en fase ofensiva y marcando goles importantes hasta llegar a nueve tantos, igualando el mejor registro de su carrera –con Melgar, en la campaña 2022–.

Por otro lado, a diferencia de 2023, Rodrigo Ureña no ha tenido un rol preponderante en el funcionamiento del equipo y durante gran parte del Torneo Clausura estuvo lesionado. En respuesta, Fabián Bustos optó por poner a Horacio Calcaterra en su posición y este rindió sin ningún problema, lo mismo que Jorge Murrugarra, quien fue titular contra Comerciantes Unidos y se erigió como uno de los mejores del partido. En cuanto a los carrileros, quienes tienen la tarea de dar amplitud y ser profundos cuando se ataca, Andy Polo tuvo un gran Apertura y sigue siendo fijo en el flanco derecho; al otro extremo, Segundo Portocarrero llegó para ofrecer características diferentes a las de Nelson Cabanillas, pero hasta la fecha ha sido muy inconstante, con desbordes que no terminan en alguna jugada de peligro o centros intrascendentes.

En la ofensiva, Alex Valera y Edison Flores se repartieron la labor de darle a Universitario lo que en un principio buscaron en Diego Dorregaray, quien solo se quedó hasta el primer semestre de la temporada. Mientras que el ‘20’ levantó su nivel en la segunda parte del año y viene marcando goles claves, el ‘Orejas’ recién volvió a aparecer contra Comerciantes Unidos y tuvo 12 partidos sin anotar. Otro detalle no menor es el de los suplentes, donde cada vez que fueron requeridos estuvieron a la altura: José Rivera cuando Valera estuvo ausente por suspensión; Diego Romero cuando Britos se lesionó en el clásico del Clausura; Horacio Calcaterra cuando le tocó tomar el rol de Ureña; y Jorge Murrugarra, quien a pesar de jugar poco siempre rinde sin importar el contexto.

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Los registros de Jorge Fossati y Fabián Bustos con Universitario en la Liga 1.

Fabián Bustos dirigió a América Mineiro antes de llegar a Universitario. (Foto: Getty Images)
Fabián Bustos dirigió a América Mineiro antes de llegar a Universitario. (Foto: Getty Images)

El 3-5-2 de Universitario bajo la lupa

Para analizar el buen momento de Universitario en la recta final del campeonato, Depor conversó con dos entrenadores para poner sobre la mesa las fortalezas y debilidades del equipo de Fabián Bustos. En primera instancia, Teddy Cardama rescató el hecho de que le hayan dado continuidad a una idea que venía funcionando muy bien. “Más allá del sistema, que viene a ser una continuidad de lo que ya venían trabajando, con el anterior entrenador marcaron diferencias con el resto de equipos. Entonces, es una constante al buen rendimiento que se sostiene desde lo colectivo e individual. Siempre digo que un torneo no es un carrera de velocidad, sino de resistencia. Es importante sostener todo lo bueno que se hace. Con Jorge Fossati varios tuvieron picos altos y salieron campeones, pero con Fabián Bustos se insertaron algunos nombres y el funcionamiento no se resintió, cada uno respondió”, expuso.

Para Cardama, enfrentar a un equipo tan sólido como la ‘U’ requiere de mucha concentración, independientemente de la estrategia que se emplee para reducir sus virtudes. “Para defenderte de un equipo que tiene muchas alternativas a partir de un sistema, el primer punto es analizarlo. El fútbol se define en detalles, en momentos, en individualidades, porque inclusive dentro de lo que ya está programado, atacando, defendiendo, uno puede estar sosteniendo al rival durante 90 minutos, pero puede pasar algo en el último instante que te cambia la ecuación. Hay que ser precisos, cometer la menor cantidad de errores posibles porque esos detalles juegan en contra”, argumentó.

Asimismo, hizo hincapié en un fórmula para intentar hacerle daño a un equipo que juega con línea de tres, siempre y cuando el entrenador cuente con los jugadores ideales para cumplir con esas funciones. “Hay que estar atentos a cualquier situación de tres cuartos de cancha para adelante. Normalmente, cuando un rival juega con dos stoppers y uno libre, teniendo a dos carrileros, hay que sostener esas dos salidas por los laterales y ponerlos mano a mano. De eso se trata. Si eso se sostiene, lo ideal es tener un mediapunta o dos (interiores) para que puedan jugar a las espaldas de ellos y obligar a que los stoppers caigan a los laterales. Si esto se cumplen, los delanteros podrían quedar mano a mano con los stoppers”, explicó.

Martín Pérez Guedes registra nueve goles y una asistencia en la Liga 1 2024. (Foto: Universitario)
Martín Pérez Guedes registra nueve goles y una asistencia en la Liga 1 2024. (Foto: Universitario)

En cuanto a lo que ofrece Universitario, apuntó hacia la variedad de caminos que tiene para generar peligro en campo rival, ya sea atacando por banda o por el centro. “Para lograr eso, tiene que haber una concatenación de hechos desde el trabajo con el arquero y luego una solidez defensiva que no les permita tener superioridad numérica con Polo o Cabanillas, que normalmente se suman para fortalecer el trabajo de Flores y Valera, siendo a veces dos extremos. La ‘U’ tiene muchas variantes, eso complica la tarea. Si los que están por fuera no son profundos, también está Pérez Guedes cuando se acerca al área, él tiene mucho ida y vuelta gracias a su físico. Eso desde el análisis, porque en el campo el cantar es otro y todo se determina por la capacidad de los jugadores”, agregó.

La mirada de Juan José Oré es muy similar a la de Cardama en cuanto a las virtudes de Universitario, sin dejar de lado que a lo largo de la temporada le ha costado ser peligroso por izquierda, caso contrario de lo que pasa por derecha. “Polo conoce bien el trabajo por ese lado, es rápido y hábil en el uno contra uno. Por izquierda es donde más le ha costado a la ‘U’. Cabanillas, que es un chico al que dirigí y conozco, comenzó como volante y luego se adaptó como marcador, por eso no tiene ese ida y vuelta que tiene Polo. Se reforzaron con Portocarrero, que es igual de veloz y tiene físico, pero le cuesta atacar con claridad. Lo importante es que atrás se mantienen los mismos nombres (Corzo, Riveros y Di Benedetto) y eso facilita el trabajo del entrenador, porque ya se conocen de memoria”, manifestó.

Más allá de las derrotas ante Melgar y ADT –las únicas que sufrió la ‘U’ en la Liga 1 2024–, hubo otros partidos donde no fue sencillo y sufrieron para ganar, como las victorias sobre UTC y Comerciantes Unidos en el Clausura, ambos por 1-0. Precisamente a eso apuntó ‘JJ’, planteando una estrategia donde las piezas importantes se sientan incómodas y no puedan gravitar durante el encuentro. “La clave está en saber cómo atacarle. Hay que tapar a los que manejan los hilos del equipo, que se sientan incómodos, hay que estar cerca porque si le das espacios pueden salir más rápido con los carrileros que tienen. Creo que cuando a la ‘U’ le han planteado así los partidos, es cuando más le ha costado sacar el resultado. Al final de cuentas, el peso de sus individualidades le permitió resolverlos, pero lo costó. Si le marcas las piezas importantes, haces que necesiten de mucha movilidad y ahí hay un desgaste”, aseveró.

Horacio Calcaterra levantó su nivel en el segundo semestre de la temporada. (Foto: Universitario)
Horacio Calcaterra levantó su nivel en el segundo semestre de la temporada. (Foto: Universitario)


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SOBRE EL AUTOR

Periodista egresado de la Universidad Nacional San Luis Gonzaga (Ica). Experiencia en medios digitales, podcast, radio, coberturas periodísticas del fútbol peruano y análisis del acontecer deportivo nacional e internacional.