César Cueto jugó los Mundiales de 1978 y 1982. (Foto: Archivo GEC)
César Cueto jugó los Mundiales de 1978 y 1982. (Foto: Archivo GEC)

Los aficionados al fútbol pensaron que estaban soñando despiertos cuando, en la mañana gris del 4 de junio de 1996, se enteraron de que el poderoso Real Madrid arribaría al Perú para jugar un amistoso ante Alianza Lima. Nunca antes un equipo peruano había enfrentado al gigante español y el espectáculo prometía.

Pero como casi siempre pasa en esta clase de eventos que involucran a un grande, el partido casi no se realiza, por una serie de factores que lo pusieron en riego.

Un poco de historia

Previo a este partido el conjunto merengue solo había jugado en el Perú una sola vez en agosto de 1927. En esa oportunidad el equipo que era dirigido por Peris Llorente y el histórico Santiago Bernabéu (quien también fue presidente del club), terminó invicto en el antiguo Estadio Nacional, en cuyas gradas de madera, estuvo presente el presidente Augusto B. Leguía.

En esa oportunidad se ‘fusionaron’ futbolistas del Callao y de Lima para hacerle frente al conjunto español, que realizaba una gira por Norte, Centro y Sudamérica y que arribó por vía marítima al puerto chalaco.

Los madridistas que tenían entre sus figuras al capitán Felix Quesada, Manuel ‘Pachuco’ Prats, Juan Urquizu, Francisco Marín, José María Peña y Desiderio Esparza, se impusieron a los del puerto por 4-1 el 14 de agosto, anecdóticamente el partido preliminar de ese día lo protagonizaron Atlético Chalaco y Alianza Lima, quien años después enfrentaría al conjunto blanco. Al día siguiente la selección de Lima igualó 1-1 con el Madrid.

Previa agitada

Regresemos a junio de 1996. Luego de varios años, Real Madrid realizaba una gira por Sudamérica y el Perú aparecía en su itinerario. Para Alianza Lima no era fácil programar amistosos (se le ‘cayeron’ los partidos ante Emelec de Ecuador, Río Branco de Brasil y la selección de Honduras) Pero estaban decididos a que el amistoso ante los españoles se juegue a toda costa.

En un primer momento el partido se programó para el 18 de junio, pero ese día el Real Madrid jugaba contra Brasil. Luego pasó al 17, pero ese día jugaba ante Peñarol y el 20, la selección peruana enfrentaba a su similar de Armenia en el Estadio Nacional.

Luego de varios idas y vueltas, Pío Dávila -presidente grane entre 1994 y 1996- anunció que el duelo se jugaría el 12 de junio. Dávila aprovechó la oportunidad para aclarar que los madridistas no vendrían con suplentes. Salvo los futbolistas convocados a la Eurocopa, el resto eran puros jugadores rankeados.

Es una realidad

El Real Madrid arribó a Lima el 11 de junio con el técnico Fabio Capello a la cabeza, quien había firmado en esa temporada en reemplazo de Jorge Valdano, quien la temporada pasada había terminado sexto en La Liga, firmado una de las peores temporadas del Real Madrid. Capello pisó Lima junto a sus principales figuras como: Fernando Rendondo, Freddy Rincón, Iván Zamorano y Juan Eduardo Esnaider. Además del duelo amistoso, los grones aprovecharían para rendirle un nuevo homenaje a César Cueto, quien con 43 años a cuestas, jugaría algunos minutos.

Los victorianos, que eran dirigidos por el brasileño Gilberto Alves, tampoco llegaban bien a este encuentro. La temporada anterior terminaron terceros y venían de empatar con Melgar en Matute y con Waldir Sáenz (como era costumbre en esa época) protagonista de temas extrafubolísticos.

Pero todo eso quedó en el olvido esa noche en el Nacional, que lucía abarrotado, no solo por hinchas de Alianza, también por hinchas del fútbol y algunos madridistas. Los capitanes Sanchís y Cueto, intercambiaron banderines y luego del sorteo la pelota empezó a rodar.

Ni bien inicio el partido el Real Madrid impuso condiciones con Fernando Rendondo como dueño y serio del mediocampo, y tuvo su primera llegada en los pies del argentino Juan Eduardo Esnaider, quien sacó un derechazo desde fuera del área, que Francisco Pizarro desactivo y mandó al tiro de esquina, del que se originó la segunda llegada de los ‘merengues’, por intermedio de Sanchis, que con un cabezazo hizo que Pizarro se volviera a lucir.

Waldir Sáenz en acción. (Foto: Archivo GEC)
Waldir Sáenz en acción. (Foto: Archivo GEC)

Show del ‘Poeta’

Cueto pasó un poco desaparecido y hasta impreciso al inicio, pero conforme fue calentando entró en ritmo de partido y dio inicio a su show. Primero habilitó a Sáenz, quien falló su oportunidad, luego lanzó un tiro libre y finalmente mandó un remate al palo en el área, luego de una buena jugada elaborada que el mismo inició y que pasó por los pies de Juan Jayo, Marco Valencia, Marcial Salazar y Sáenz.

El primer tiempo se fue con un Alianza sólido en defensa, tratando de aprovechar un descuido de los españoles y tratando de elaborar jugadas con Valencia y Cueto como protagonistas. Al frente el Madrid se floreaba con un Redondo omnipresente, que se encargaba de rotar la pelota para hacerla llegar a Esnaider, Rincón o Zamorano, quienes tenían mucha movilidad. Un fútbol directo y efectivo.

En la segunda mitad el encuentro continúo con la misma tónica y apenas a los 10’ Esnaider recibió un pase en profundidad de Lasa y puso el 1-0 tras eludir a Pizarro y Machaca. Ese fue el último partido del delantero argentino en el Real Madrid, pues fue traspasado al Atlético de Madrid. Pero no fue el único que se despidió fue Iván Zamorano partió al Inter de Italia y Freddy Rincón al Palmeiras brasileño.

Faltando algunos minutos el ‘Poeta de la zurda’ abandonó el campo para darle paso a Gustavo Tempone, no sin antes regalarle un magistral pase a Waldir, quien tiró la pelota afuera, ante la mirada incrédula de los asistentes al Estadio Nacional.

El partido se fue diluyendo y las esperanzas de empate para los aliancistas también, pero eso era la de menos para los hinchas que tuvieron la oportunidad de ver a su equipo enfrentando a un grande de Europa.

Ambos equipos tuvieron destinos dispares en ese año. El Real Madrid salió campeón de esa temporada de La Liga, mientras que Alianza Lima terminó segundo en el Descentralizado de 1996.